Escuela para padres

Ser padre, es una de las labores más hermosas y complicadas del ser humano. Encontrar el punto medio entre el amor y la disciplina no es fácil.

A continuación encontraran una serie de artículos que nos ayudarán a identificar que tipo de padres somos y los errores más comunes en la educación, ojalá sirva de algo esta información y recuerden que el motor mas importante que tenemos para educarlos es el gran amor que les tenemos. Seamos padres valientes!.

En escuela para padres estamos para apoyarte, puedes revisar mas temas de superación personal en nuestro blog y también ponemos a tu disposición nuestra opciones de terapia, mas información aquí.

Indice de articulos

Educando con amor

Los métodos de educación a lo largo de los años han cambiado, sin embargo  el objetivo siempre ha sido el mismo, tener hijos sanos emocionales para que puedan enfrentar los retos que la vida les vaya presentando esto mediante el amor, el respeto, la comunicación y la confianza.

PADRES Y/O MADRES AUTORITARIOS 

Estos padres son inflexibles en sus normas y conductas, tienen siempre el control y usan por lo regular consecuencias desproporcionadas con los hijos. Lamentablemente suelen concentrarse solo en el comportamiento negativa y no tomar en cuenta el positivo.

* Este tipo de padres pueden crear a un pequeño con miedo a los padres y a cualquier otra figura de autoridad, este miedo los hace maestros de la mentira y expertos en ocultar sus conductas “inapropiadas”. Son pequeños que buscan la aprobación del adulto a costa de todo. Por lo general tienen baja autoestima, poca confianza en sí mismos, introvertidos e inseguros.

PADRES Y/O MADRES PERMISIVOS

Este tipo de padres permiten a los hijos regirse y dirigir sus propias actividades. Les cuesta poner limites. No son exigentes, ni establecen normas y por lo general es el padre quien se adapta a la voluntad del hijo.

Desafortunadamente este tipo de padres ha ido en incremente los últimos años y esto se debe al sentimiento de culpa por el que atravesamos por las jornadas laborales tan pesadas.

Es importante que tomemos en cuenta que el amor no esta de ninguna manera en contra de la disciplina. Otorguemos tiempo de calidad sin quitarles la oportunidad de aprender y crecer en el día a día.

*Los padres permisivos crean hijos con escaso o nulo control sobre su conducta y sus emociones. No reconocen ni respetan autoridad alguna. Poca tolerancia a la frustración. Manipuladores, por lo regular tienen bajos logros escolares y presentan fuertes problemas de socialización.

PADRES Y/O MADRES SOBREPROTECTORES

Estos padres hacen todo por sus hijos e hijas, los defienden de cualquier situación, en el afán de protegerlos procurando que jamás salgan lastimados.

De manera inconsciente es una forma amorosa de inutilizarlos dándoles el mensaje de no poder hacer las cosas por eso nosotros tenemos que resolver su vida.

  • Este tipo de padres son creadores de hijos inseguros, de baja autoconfianza y por ende autoestima; con muy poca tolerancia a la frustración.
  • Por lo regular son manipuladores y tienen bajo rendimiento académico, esto se debe a que se rinden al menor esfuerzo. Debido a su inseguridad, por lo general tienen problemas de socialización.

Y por último lo que pudiéramos considerar como el ideal de padres:

PADRES Y/O MADRES DEMOCRÁTICOS 

Estos padres tratan de dirigir sus actividades de manera racional, prestando atención a las necesidades de acuerdo con la edad y situación de sus hijos e hijas.

Muestran respeto, saben escuchar, son exigentes y amorosos con sus hijos. Predican con el ejemplo.

*Obviamente este tipo de padres desarrolla niños y niñas seguros, independientes, sociables, con buena autoestima, saben controlar de manera más asertiva sus emociones, no se siente juzgados, se sienten acompañados en su crecimiento, y por lo regular tienen muy buenos resultados escolares, más por convicción y disciplina que por imposición de los padres.

TECNICAS RECOMENDABLES PARA UNA BUENA EDUCACION 

Favorezca la comunicación asertiva, recuerde: efectiva, afectiva y oportunamente. Establezca normas de conducta con limites y consecuencias que se puedan cumplir y acordes a la edad de su hijo.

Reconózcale verbal y emotivamente sus logros por pequeños que sean.  Sea congruente, predique con el ejemplo, adopte esta forma de educar como la mejor manera.

  • Elogie y reconozca a su hijo cuando lo merezca (no lo premié)
  • Exprésele siempre su cariño.
  • Anímelo a enfrentar retos de acuerdo con su edad
  • Sea constante con la disciplina – sugiero realizar en familia un decálogo de normas básicas que se deben respetar dentro y fuera del hogar.
  • Sea paciente y prudente respete los espacios de sus hijos
  • Invierta amor y tiempo de calidad en la educación de sus hijos, es su mejor inversión.
  • Sea congruente: Predique siempre con el ejemplo.
  • Desarrolle la resiliencia en sus hijos, enséñelos a no huir de los problemas sino al contrario enfrentarlos con valor, pero, sobre todo
  • Sane sus heridas primero y podrá darles a ellos lo mejor.

Los métodos de educación han cambiado, sin embargo, el objetivo siempre ha sido el mismo, tener hijos sanos e inteligentes emocionales para que puedan enfrentar los retos que la vida les vaya presentando.

Lograr esto no es sencillo y menos si concientizamos que esto lo debemos conseguir mediante el amor, el respeto, la comunicación y la confianza.

ERRORES MAS COMUNES QUE DEBILITAN LA EDUCACIÓN DE NUESTROS HIJOS: 

  • Ser Permisibles – accediendo a todos los caprichos del pequeño.
  • Ser Autoritarios – haciendo con esto que el pequeño actúe más forzado por el miedo.
  • Ser incongruentes –Recordemos que el ejemplo es el mejor método de disciplina y formación
  • No cumplir promesas ni consecuencias – las consecuencias deben ir de acuerdo con la falta cometida teniendo como meta el aprendizaje del pequeño, es decir corregir la conducta.
  • Uso de violencia – de cualquier tipo, verbal, psicológica, emocional y física.
  • Mala comunicación – Saber escuchar y expresarnos hace la diferencia.
  • Truncar su expresión emocional – limitar sus emociones no les permite crecer.
  • Comparar – ni a favor ni en contra
  • Querer que cumplan nuestros sueños – Nuestro objetivo principal es que ellos realicen sus propios sueños para que sean plenos y felices.
  • Negar que existe un problema evidente (evadir) – Sobre todo en el periodo de la adolescencia. Buscar ayuda de forma oportuna incluso preventiva te evitara muchos problemas y situaciones complicadas. (Adicciones, Trastornos conductuales, alimenticios, emocionales, etc.).

Espero de todo corazón que esta información les sea de utilidad. Disfrutemos con plenitud nuestra paternidad. ¡Seamos Valientes!

“No le evites a tu hijo las dificultades de la vida, enséñale a enfrentarlas”

“El amor de un padre no conoce límites”

“Soy el único responsable de mi éxito y de mi felicidad”  

“Atraigo a mi vida personas maravillosas” 

Recomendaciones de libros que pudieran ayudar en el tema que estamos trabajando. En esta ocasión les recomiendo

“Tu hijo, tu espejo”, de Martha Alicia Chávez.

“Los 7 hábitos de los adolescentes” Sean Covey

 

Escuela para padres

Comunicándonos con nuestros hijos

Uno de los retos mas importantes que tenemos los seres humanos es ser padres y dentro de ese desafío un renglón que nos cuesta trabajo es el de la comunicación, ya que cometemos muchos errores algunas veces involuntarios que van mermando  y poniendo barrera en la relación con nuestros hijos.

  • Uno de los problemas mas recurrentes en la comunicación, sobre todo con los adolescentes es el no escucharlos, ni validarlos en sus intereses personales. Muchas veces nos convertimos en meros proveedores materiales y nos olvidamos por completo en su necesidades afectivas. Lo cual los hace no sentirse parte de una familia y buscan pertenencias en otros lugares o con otras personas en la mayoría de las ocasiones equivocadamente. 
  •  Es muy importante que te intereses en sus cosas, que conozcas a sus amigos, sepas lo que les gusta y lo que les molesta, todo esto sin intentar forzar la confianza invadiendo su privacidad. Lo más sano sería que tu hijo sepa que cuenta contigo y que puede expresarte cualquier situación por la que este pasando por delicada o dolorosa que esta sea.
  • En esa necesidad de los padres de que sus hijos no cometan errores toman decisiones por ellos y esto hace que se sientan controlados y por supuesto no tomados en cuenta como individuos que son, están aprendiendo y es vital que aprendan de sus errores, es mucho mejor si los ayudas a analizarlos. Además recordemos que están en un proceso de muchos cambios algunos nada gratos.
  • Juzgar antes de escuchar, trunca la comunicación, si esto sucede tu hijo se sentirá siempre vulnerable y modificará la verdad si esto calma la ira de su padre, evidentemente para evitar problemas. Mentir se convierte en la solución a todos sus problemas, es mucho mas gratificante apoyar la honestidad escuchándolos con atención y siendo empático.
  • Los adolescentes necesitan normas y limites (aunque verbalmente expresen lo contrario), ve graduando esos limites favoreciendo tanto la comunicación como el respeto a las normas y acuerdos establecidos. Enseñémosle que la vida es un maravilloso juego, solo hay que aprender a jugarlo.
  • Estando el adolescente en proceso de aprendizaje, es común que cometa errores, es muy importante que haya consecuencias constructivas que le permitan reconocer su error. Recordemos siempre no desaprobarlo a él como persona sino su acción o comportamiento, lo cual se puede corregir. Por favor reconoce y refuerza todos sus logros por pequeños que estos sean, esto favorecerá su autoestima y autoconfianza.
  • Establece en casa un modelo de conducta adecuado que sea congruente y vaya de la mano de los principios que se buscan inculcar, propiciemos un ambiente sano.

Reconozcamos que ser padre es una labor maravillosa cuyos elementos más importantes son: el amor, el respeto, la empatía y por supuesto la comunicación.

SOS de un hijo

“Mamá soy Paquito…y haré travesuras, porque soy un niño y me gusta explorar, intento expresar mi mundo interno con imaginación y creo una realidad en la que me encantaría que me acompañaras, me guíes, me aceptes, me entiendas”.

Y Paquito sonríe nervioso, esa travesura que acaba de hacer según su maestra llego a los límites, es urgente llevarlo a un especialista, escucha Paquito a la maestra expresarlo con su madre, esta con angustia solo asiente con la cabeza, toma de la mano al pequeño y sale del recinto.

Dentro de la angustia del pequeño, intentaba entender que había hecho mal, su imaginación lo invitó a luchar contra guerreros de papel que amenazaban con destruir todo a su paso, el sólo quería ayudar, salvar vidas y en esa feroz batalla se había llevado un jarrón que tenía la maestra sobre su escritorio.

¿Qué hiciste? Fueron las palabras que lo hicieron salir bruscamente de su embeleso, abrió los ojos lo más que pudo, intentando observar y entender la “tragedia” que angustiaba a su maestra, ¡pero si solo era un juego!, pensaba, ¿Por qué es tan difícil de entender?

En los últimos años la depresión, la ansiedad y la angustia en los menores de edad ha venido en aumento, algunos viven en total abandono emocional por las jornadas tan prolongadas de los padres, se utilizan los centros de estudio como guarderías casi permanentes, y algunas veces la misma escuela se convierte en perseguidora y aniquiladora de emociones, ya que por lo regular entendemos por un niño disciplinado aquel que solo permanece sentado y obedece sin chistar cualquier instrucción.

El niño y el adolescente se acostumbra a vivir con miedo, a expresarse poco y esto nos da como consecuencia:  jóvenes resentidos con un pobre o nulo manejo de emociones.

Somos padres ocupados, incapaces de escuchar mucho menos de atender y acompañar en todas las etapas a nuestros hijos.

Somos padres poco asertivos que por lo regular nos vamos a los extremos, podemos ser demasiado rígidos o permisibles, provocando en ellos incertidumbre y vulnerabilidad en sus vidas.

Entendamos pues que la salud emocional de los niños es tan importante como la física, aprendamos a identificar signos que puedan decirnos que nuestro hijo o hija esta deprimido, ansioso o le cuesta mucho gestionar adecuadamente sus emociones:

*Intensifica sus emociones. Es decir, llora sin motivo aparente o suele enojarse con mucha facilidad.

*Tiene malos hábitos de sueño: puede dormir más de la cuenta o tener insomnio.

*Presenta síntomas de ansiedad: se come las uñas, se jala con regularidad el cabello, etc.

*Tiene malos hábitos alimenticios: come en exceso o deja de comer.

Hagamos conciencia, eduquemos y acompañemos con amor, en cualquier papel que nos toque vivir dentro de la viva del pequeño o pequeña: padre, maestro, tutor, etc. Seamos congruentes, aprendamos primero a manejar nosotros nuestras emociones y démosles a ellos la oportunidad de vivir en plenitud y crecimiento. 

Dejémoslos jugar, ensuciarse, caerse, imaginar, indagar, explorar, pero siempre acompañados, esto los hará adultos plenos y felices. Y si es necesario busquemos ayuda a tiempo, no permitamos por ningún motivo que nuestros hijos engrosen estadísticas grises de pequeños que pudieron haber brillado y se convirtieron en noticia.

Si tienes alguna duda acercad del contenido de escuela para padres o quieres compartir con nosotros algún comentario puedes hacerlo en este link.